carpita-de caballete: PINTURAS EN PEQUEÑO FORMATO

SOBRE LA SERIE: "Zemíes"

ENTRE LAS COSAS QUE MOSTRABAN LOS NATIVOS, COLÓN NOTÓ LO QUE HOY LLAMARÍAMOS “OBJETOS FIGURATIVOS”.[…]

ESAS COSAS TIENEN EN “TAÍNO”, LA LENGUA DE LAS ISLAS, UN NOMBRE GENÉRICO, EL DE “ZEMÍES”, Y SE LES DA EL NOMBRE DE UN ANTEPASADO.

PROVISTOS DE FUNCIONES POLÍTICAS, DE PROPIEDADES TERAPÉUTICAS Y CLIMÁTICAS, LOS ZEMÍES TIENEN SEXO, HABLAN Y SE MUEVEN.

OBJETOS DE UNA INNEGABLE PERO DESIGUAL VENERACIÓN, SON TAN APRECIADOS QUE LOS NATIVOS SE LOS ROBAN LOS UNOS A LOS OTROS Y, DESPUÉS DEL “DESCUBRIMIENTO”, LOS OCULTAN A LOS ESPAÑOLES.

CADA ZEMÍ TIENE UN ORIGEN SINGULAR:

“UNOS CONTIENEN LOS HUESOS DE SU PADRE Y DE SU MADRE Y PARIENTES Y DE SUS ANTEPASADOS; LOS CUALES ESTAN HECHOS DE PIEDRA O DE MADERA. Y DE AMBAS CLASES TIENEN MUCHOS; ALGUNOS QUE HABLAN, Y OTROS QUE HACEN NACER LAS COSAS QUE COMEN Y OTROS QUE HACEN LLORAR Y OTROS QUE HACEN SOPLAR LOS VIENTOS.”

[…]¿QUÉ DEBEMOS CONSERVAR DE ESTA FASE DE RECONOCIMIENTO?

QUE EL PROBLEMA DE LAS IMÁGENES DEL “OTRO”, DE SUS FUNCIONES Y DE SUS CARACTERÍSTICAS, SE PLANTEÓ AL INSTANTE A LOS “DESCUBRIDORES” Y QUE AL PRINCIPIO PARECIÓ AVANZAR HACIA UNA RESPUESTA ORIGINAL.

PERO ESTO NO FUE MAS QUE UN PARÉNTESIS, PRESUROSAMENTE CERRADO. NI COLÓN NI SUS COMPAÑEROS NI LOS PODEROSOS QUE MANDABAN LA EMPRESA SOÑARON CON DISFRUTAR LAS DELICIAS DE LA ETNOGRAFÍA, Y PRONTO EL PARAÍSO DE LAS ISLAS SE CONVIRTIÓ EN UN INFIERNO DONDE IMPERARON LA EXPLOTACIÓN BRUTAL, EL HAMBRE Y LA ENFERMEDAD MICROBIANA…

SIN EMBARGO, LO IRREPARABLE SE PRODUJO DESDE FINES DEL AÑO1496.

TAL FUE, SIN DUDA, EL PRIMER CONFLICTO AMERICANO DE ESTA “GUERRA DE LAS IMÁGENES”.

ALGUNOS NATIVOS SE HABÍAN APODERADO DE LAS IMÁGENES CRISTIANAS QUE LOS ESPAÑOLES HABÍAN CONFIADO AL CUIDADO DE UNOS NEÓFITOS:

“SALIDOS AQUELLOS DEL ADORATORIO, TIRARON LAS IMÁGENES AL SUELO Y LAS CUBRIERON CON TIERRA Y DESPUÉS ORINARON ENCIMA DICIENDO: ‘AHORA SERÁN BUENOS Y GRANDES TUS FRUTOS’(…)Y ESTO PORQUE LAS ENTERRARON EN UN CAMPO DE LABRANZA, DICIENDO QUE SERÍA BUENO EL FRUTO QUE ALLÍ SE HABÍA PLANTADO; Y TODO POR ESE VITUPERIO. LO CUAL VISTO POR LOS MUCHACHOS QUE GUARDABAN EL ORATORIO (…) DIJERON QUE HABÍAN DESTROZADO Y ESCARNECIDO LAS IMÁGENES” Ramón Pané

ESE SACRILEGIO FUE CASTIGADO POR EL HERMANO DE COLÓN, QUE HIZO QUEMAR VIVOS A LOS CULPABLES.

LA BRUTALIDAD DE LA REPRESIÓN ESPAÑOLA-EJERCIDA POR LAICOS- PROBABA LA INVIOLABILIDAD DE UN DOMINIO QUE MEZCLÓ INEXTRICABLEMENTE LA POLÍTICA Y LA RELIGIÓN: EL RESPETO A LAS IMÁGENES DE LOS BLANCOS ES TAN INTANGIBLE COMO LA SUMISIÓN DEBIDA A LOS COLONIZADORES. PERO LA PROFANACIÓN HABÍA IDO ACOMPAÑADA POR UN RITUAL DE FERTILIDAD QUE MANIFIESTAMENTE ATRIBUÍA A LAS IMÁGENES UNA EFICACIA PARECIDA A LA DE CIERTOS ZEMÍES.

EN ESE SENTIDO, EL “SACRILEGIO”, MOSTRÓ LA CERCANÍA QUE LOS NATIVOS PRESINTIERON ENTRE LAS IMÁGENES DE LOS CRISTIANOS Y LOS ZEMÍES LOCALES, Y HASTA EL PARTIDO QUE, SEGÚN IMAGINARON, PODÍAN SACAR DE ÉL.

COMENZÓ LA LARGA LISTA DE DESTRUCCIONES, DE APROPIACIONES, DE DESVIACIONES Y DE EQUÍVOCOS CON QUE ESTÁ TEJIDA LA HISTORIA CULTURAL DE AMÉRICA LATINA. […]

“CONFECCIONABAN (…) IMÁGENES HUMANAS SENTADAS, SEMEJANTES A LOS ‘ESPECTROS NOCTURNOS’ QUE NUESTROS ARTISTAS PINTAN EN LAS PAREDES” Pedro Mártir – 1501.

[…] LOS ESPECTROS NO TENÍAN NADA DE IMAGINARIO. POR ENTONCES SE CREÍA COMUNMENTE QUE UNOS ESPÍRITUS PODÍAN INFESTAR LAS MORADAS Y QU ERA POSIBLE PROTEGERSE CONTRA ELLOS TOMANDO TODA CLASE DE PRECAUCIONES QUE ESTIPULA EL DERECHO ROMANO; SE CREÍA QUE LOS DIFUNTOS, LAS SOMBRAS, PROPAGABAN ENFERMEDADES Y SEMBRABAN LA MUERTE, SE RECOPILABAN RELATOS DE APARICIONES QUE PROVOCABAN ESPANTO. […]

EN ESE ASPECTO, RESULTABA TRANQUILIZADOR SABER QUE LAS APARICIONES NOCTURNAS HABÍAN DESAPARECIDO CON LA ELIMINACIÓN DE LOS ZEMÍES EN EL MOMENTO EN QUE (…) EL MUNDO DE LOS MUERTOS AUMENTABA CON LAS POBLACIONES DIEZMADAS POR EL HAMBRE, EL TRABAJO (ESCLAVO) Y LA ENFERMEDAD.[…]

LA INTERPRETACIÓN ESPECTRAL- YA EN DESUSO- DEBÍA BORRARSE CON EL TIEMPO, A MEDIDA QUE PEDRO MÁRTIR LES DABA LA APARIENCIA DE DEMONIOS, CERCA DE 1514, CUANDO RELATABA LA AGRESIÓN DE PESADILLA DEL “DEMONIO DE ZÉME, RABUDO, CON ENORMES DIENTES, CORNUDO […]”

EL ZEMÍ CAE EN LO DEMONÍACO Y LO MONSTRUOSO; SE DISUELVE EN LA FIGURA DEL DIABLO COMO SI EL AUTOR CEDIERA A LA TENTACIÓN DEL CLICHÉ Y RENUNCIARA A PRECISAR LA ESPECIFICIDAD DEL OBJETO. LA DEMONIZACIÓN- QUE, DE HECHO, ESTÁ EMPARENTADA AQUÍ CON UNA ESPECIE DE NEUTRALIZACIÓN CULTURAL- TERMINA HACIENDO DEL ZEMÍ UN ÍDOLO.

[…] ZEMÍ-ESPECTRO, ZEMÍ-DIABLO, ZEMÍ-ÍDOLO: POR DESLIZAMIENTOS SUCESIVOS, EL OBJETO DESAPARECE BAJO LAS DENOMINACIONES CONVENIDAS.[…]

[…] DE COLÓN A PANÉ, DE PEDRO MÁRTIR A OVIEDO, LA MIRADA OCCIDENTAL SOBRE LOS OBJETOS DE LAS ISLAS SE HAN ENDURECIDO PROGRESIVAMENTE EN LA DOBLE CERTIDUMBRE DE IDENTIFICAR Y RECONOCER EN ELLA AL DIABLO. PASADO EL CHOQUE DE LO DESCONOCIDO Y LA PRIMERA INTERPRETACIÓN COLOMBINA, TENTATIVA Y FLEXIBLE, SE EFECTUÓ EL ENCUADRE (P.MÁRTIR), SE REDUJO EL CAMPO, SE ESTILIZÓ Y SE DRAMATIZÓ LA VISIÓN, HASTA QUE SURGIÓ “LA VISIÓN AMERICANA”, EN REALIDAD, RÉPLICA PURA DE UN DÉJÀ-VU EUROPEO. LA MIRADA DEL COLONIZADOR COLOCÓ SOBRE LO INDÍGENA LA RED REDUCTORA PERO EFICAZ Y CÓMODA DE LO DEMONÍACO. […]

DESAPARICIÓN DE LO SINGULAR.

LA NEGATIVA A COMPRENDER NO ES UNA FALLA EN LA MIRADA SINO UN IMPERATIVO ACOMPAÑADO DE UNA MALDICIÓN LANZADA CONTRA LAS “DESCOMULGADAS Y MALDITAS IMÁGENES”.

Fragmentos extraídos de “La guerra de las imágenes”(1990) de Serge Gruzinski

SOBRE LA SERIE: "Erótica"

Existe una constante en el arte latinoamericano: la comparación con los estilos o vanguardias europeas ( surrealismo, cubismo, etc.); este hecho limita toda posibilidad de nombrar algo como propio, a la vez se basa en una clasificación errónea del arte (teoría de estilos).

En el caso de algunos artistas argentinos la comparación con Europa o EE.UU. ha sido sorteada con suerte, pero igual no han podido dejar de lado a otros importantes referentes como el arte cinético venezolano o el muralismo mexicano.

Marcelo Carpita aún teniendo una importante formación y producción muralística trata de apartarse de estos modelos establecidos. Su obra se desarrolla en dos ejes fundamentales: la pintura mural y la pintura de caballete, abarcando una amplia variedad de temas.

Mientras que en sus murales predomina una temática de carácter social vinculada, en algunos casos, a lo político y religioso; en la obra de caballete el tema da lugar a la pintura en sí misma. La pintura en sí parte del color, de la mancha, de la materia.

El erotismo aquí es una excusa para muchas otras búsquedas que son plásticas. Es una pintura intimista, que en el caso de Carpita, se vuelve mas interesante porque complementa y completa a esta otra pintura suya realizada en el mural.

En esta serie erótica el uso matérico da lugar a una huella abundante y espesa que revela el gesto, la figuración esta dada por la línea que estructura junto a los planos, delimitando el color. La paleta que en algún caso es restringida (blancos, grises, rosas) luego se amplía con la utilización de los complementarios.

Estas obras, que en un comienzo, se componen siguiendo una estructura de eje central en el manejo matérico, va dando lugar poco a poco a composiciones mas complejas, que permiten también mas soltura en el uso del color.

Estos cambios, desde lo plástico, manifiestan un cambio en el discurso erótico que al comienzo es directo, casi normal (octópodos) y luego se transforma en un juego de pares donde aparece como elemento central “la mujer” y a su vez, de algún modo, “el amor” (la pollera azul de lino).

Aquí las figuras se expresan a través del lenguaje de los cuerpos. Usando la espátula como herramienta, Carpita, da un carácter espontáneo, casi primitivo a su pintura. Cada parte de la mujer, su color, la transparencia de su piel, etc. han sido tratadas con una aparente ligereza, logrando la unión de elementos tan dispares como la forma, el color, y el tono en un todo vibrante. Los cuerpos contorsionados, acostados, unidos, contenidos, están envueltos en una atmósfera de sensualidad.

La utilización de algunos recursos como el grafismo y el rayado (para el pelo, por ejemplo) acentúa el dibujo certero.

“La mujer”, como protagonista de éstas, articula y constituye a la pintura, a la vez que establece la relación con el “otro”, el hombre; que la mayoría de las veces funciona como contención, como fondo o confundiéndose con él.

Hace poco Carpita me dijo: “...la mujer estructura”, lo veo claro en sus pinturas y le estoy agradecida.

Lic. Valeria Morelli – Crítica de Arte-

Historia del arte-UBA

SOBRE TODO

“[...]Allá hallarás mi querencia. El lugar que yo quise. Donde los sueños me enflaquecieron.

Mi pueblo, levantado sobre las llanuras. Lleno de árboles y de hojas, como una alcancía donde hemos guardo nuestros recuerdos.

Sentirás que allí uno quisiera vivir para la eternidad. El amanecer, la mañana, el mediodía y la noche, siempre los mismos; pero con la diferencia del aire. Allí, donde el aire cambia el color de las cosas; donde se ventila la vida como si fuera un murmullo; como si fuera un puro murmullo de la vida.[...]”

“Pedro Páramo” (fragmento) / Juan Rulfo

“...Así pues (...) que con educada sensibilidad figurativa se ha paseado por los patios de la inmensa fábrica, por entre los montones de desechos de la periferia industrial. Por los almacenes de una empresa metalúrgica ha descubierto fragmentos de realidad que no tienen nada que envidiar a las creaciones de los artistas(...) Bellezas de materia herida y sufriente...”

HUMBERTO ECO

(“Los colores del hierro”)

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